viernes, 6 de octubre de 2017

Panel de Ensayos en Solidaridad con Venezuela.



"Panel de Ensayos en Solidaridad con Venezuela."


Grupo de Dominicanos por la Unidad de Latinoamericana y Caribeña.


Ensayo Por: Nemen Hazím, Puerto Rico.
Ponencia para el Primer Encuentro por la Paz y Solidaridad con Venezuela auspiciado por el grupo “Dominicanos por la Unidad Latinoamericana y Caribeña”
Sobre el autor: Boschista, sin afiliación partidista. Luchador incansable contra las injusticias. Nació en San Pedro de Macorís, República Dominicana, el 20 de marzo de 1954. Graduó de Ingeniero Mecánico Electricista "Magna Cum Laude" en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, el 28 de octubre de 1977. Participó en importantes eventos mundiales y cursó estudios complementarios en Estados Unidos, Puerto Rico, Cuba, Argentina, República Dominicana y Uruguay. Fue Ayudante de Profesor en las asignaturas Mecánica Racional y Máquinas Eléctricas en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, de 1972 a 1976; Profesor de Circuitos Eléctricos y Director de las Escuelas de Ingeniería Eléctrica e Ingeniería Mecánica en la Universidad Central del Este, de 1980 a 1985. Ocupó diversos cargos en la Corporación Dominicana de Electricidad, empresa a la que ingresó en 1977 y de la que renunció, en noviembre de 1988, al cargo de Gerente de Turbinas de Gas y Motores Diésel. Radicó en Puerto Rico desde finales de 1988, trabajando para Ceisco Engineering como Ingeniero de Proyectos. En 1995, como copropietario, fundó Ingelmec, Inc., una compañía de Ingeniería Eléctrica que ejerció hasta el 31 de diciembre de 2012. Desde el 1 de enero de 2013 trabaja por cuenta propia.
Mencía Ortíz nos pidió que participáramos en este 'Primer Encuentro por la Solidaridad con Venezuela'. Al no poder asistir nos sugirió que presentáramos por escrito un breve análisis sobre las 'Amenazas para la región latinoamericana y caribeña de una intervención militar de EE.UU. en Venezuela', petición que pasamos a hacer realidad no sin antes expresar lo honrado que nos sentimos por la oportunidad de exponer en un foro que, entre otras cosas, busca respeto para el gobierno surgido de elecciones transparentes y democráticas que encabeza Nicolás Maduro, paz para todos los venezolanos y reconocimiento al derecho que debe asistirle a cada nación de administrarse de acuerdo a las normas que considere apropiadas para proveer a sus ciudadanos condiciones favorables de vida sin la necesidad de apelar, como es habitual en otros, a la usurpación de recursos foráneos.
"Una intervención militar de EE.UU. en Venezuela" dejaría de ser una amenaza "para la región latinoamericana y caribeña" y se convertiría, de facto, en la ocupación de un Estado soberano de los que medularmente la integran. Desde el mismo 2 de febrero de 1999, fecha en la que Hugo Chávez juramentó como presidente constitucional, Estados Unidos dio inicio a las acciones perturbadoras que ha venido perfeccionando desde los años subsiguientes a la conclusión de la Segunda Guerra Mundial y que han impedido al pueblo venezolano disfrutar de paz y tranquilidad durante el tiempo que lleva la Revolución Bolivariana ejerciendo el poder.
"Este día no es un día más; esta transmisión de mando presidencial no es una transmisión de mando presidencial más. No; es la primera transmisión de mando de una época nueva: es el abrir la puerta hacia una nueva existencia nacional. En Venezuela se respiran vientos de resurrección... Nosotros le vamos a dar cauce pacífico y cauce democrático a esta revolución... Seré un pregonero y un acelerador, hasta donde pueda, de los procesos de integración. Es momento de retomar el sueño de unión entre nosotros; de plantearnos una moneda para la América Latina y el Caribe para la próxima década; busquemos y luchemos por ella. De plantearnos una Confederación de naciones de esta parte del mundo; de plantearnos una unidad que vaya mucho más allá del intercambio comercial". Estas palabras marcaban el derrotero de un modelo político, considerado agotado, en una región sojuzgada por Estados Unidos, y harían repercutir el discurso de Chávez, dentro de las más altas esferas del Pentágono, como ningún otro lo había hecho desde aquel que pronunciara Fidel Castro -el 16 de abril de 1961, en las exequias de las víctimas de los bombardeos que se realizaron sobre Cuba durante la invasión de Playa Girón- declarando el carácter socialista de la Revolución Cubana.
El contenido fundamental de ese primer discurso de Hugo Chávez estimularía al Pentágono y a la maquinaria política que le sirve a redefinir "estrategias" para evitar que los recursos que operaban a su antojo no les fueran vedados, y, de igual manera, para frenar el desarrollo y la expansión del 'Socialismo del siglo XXI', concepto que vería la luz en 1996 por vía de Heinz Dieterich -sociólogo y analista político alemán-, que alcanzaría exposición global por voz del mismo Chávez en el 'V Foro Social' que tuvo lugar en la ciudad de Porto Alegre, Brasil, en el año 2005. Esa práctica de democracia participativa definida por Dieterich, que desnuda la realidad de la democracia representativa o formal (en la que los congresistas "no representan a aquellos que les dieron el mandato, sino (que, NH) los sustituyen. Elegidos para servir al pueblo, sólo sirven a dos amos: a las élites y a sus propios intereses"), sería vista por Estados Unidos, luego de la caída del Muro de Berlín, como la gestación de una nueva epidemia comunista.
Las "estrategias" que Estados Unidos tendría que redefinir asomaron por vez primera tan pronto el mundo, al concluir el mayor conflicto bélico que registra la historia, quedó polarizado. La Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), organismo de espionaje que acababa de estrenar la potencia del mundo occidental (1947), y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), también de reciente formación (1949), en el afán de frenar la expansión del comunismo soviético, organizaron en Europa, por más de medio siglo, "atentados falsamente atribuidos a la izquierda y a la extrema izquierda para desacreditarlas ante los electores. Esa estrategia perdura hoy en día como medio de propiciar el miedo hacia el Islam y de justificar guerras por el petróleo" (Daniele Ganser/Los ejércitos secretos de la OTAN).
Si a lo expresado por Chávez se añade que Venezuela -"el patio trasero" más atractivo al imperio- es el primer país del mundo con las mayores reservas probadas de petróleo crudo, el segundo con los mayores recursos de agua dulce, el octavo con la mayor existencia de gas y, además, posee grandes yacimientos de minerales altamente estratégicos y valiosos, no debe resultar extraño el nivel de agitación permanente que ha montado Estados Unidos con la colaboración de la desplazada oligarquía local, como tampoco debe sorprender la continua provocación para, como bien expresara el historiador y profesor de la Universidad de Basilea, "justificar guerras por el petróleo".
Estados Unidos auspicia en Venezuela, además de un golpe de Estado, una guerra civil parecida a la que coadyuvó a desarrollar en algunos países del Medio Oriente. Se sirve, para ello -con el propósito de debilitar el gobierno que encabeza Nicolás Maduro-, de la manipulación informativa (a la que se prestan, por intereses muy claros, los grandes medios de comunicación propiedad de la oligarquía), el boicot económico y el financiamiento de acciones de sabotaje y terror. Por razones muy obvias el Pentágono ha incrementado instalaciones y efectivos militares tanto en Perú como en Colombia; en Honduras cuenta con la base militar Soto-Cano, anteriormente conocida como Palmerola; en El Salvador con la de Comalapa; en Cuba con la naval de la Bahía de Guantánamo y en Costa Rica, un país que no posee ejército, con un radar que el gobierno tico se ha empeñado en explicar que "utiliza para su propia seguridad".
Sólo al oeste luce estar Venezuela despejada de instalaciones bélicas propiedad de Estados Unidos, pero, con la hostilidad que exhibe el gobierno de Michel Temer hacia la tierra de Bolívar (cuya instalación brota precisamente de los planes intervencionistas norteamericanos, concebido para fracturar la alianza estratégica que se había establecido entre la Revolución Bolivariana y las administraciones de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff), se puede esperar la participación de tropas brasileñas que cierren el cerco y actúen de la mano con las norteamericanas. Desde el norte, el presidente de Estados Unidos ha asegurado que "Washington maneja muchas opciones respecto a la situación de Venezuela. No descarto una opción militar; tenemos nuestras tropas en todo el mundo, en lugares muy, muy lejanos. Venezuela no está lejos". El fundador de la Red Voltaire, Thierry Meyssan, explica que, para llevar a cabo operaciones militares como éstas, "EE.UU. necesita rodear al país que va a atacar o al menos tener una base militar en su frontera. En Libia utilizaron a Egipto; en el caso de Siria, casi todos los estados aledaños: Turquía, Líbano, Irak y Jordania... Si van a atacar a Venezuela, sin duda van a utilizar a un estado o a varios estados fronterizos con Venezuela".
Las "razones" para una posible intervención militar de Estados Unidos en Venezuela se multiplican con el paso de los días y cada vez son más los personajes que se suman a los intereses del Pentágono, aún bajo un gobierno que se ha mostrado renuente a someterse a las directrices del establishment. La situación luce preocupante al asomar el cliché de la amenaza a la seguridad nacional y al estilo de vida de los norteamericanos. Barack Obama renovó la orden ejecutiva que declara "emergencia nacional por la amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad y a la política exterior causada por la situación en Venezuela". Ahora el turno correspondió a Mike Pence, actual vicepresidente: "la crisis venezolana amenaza la seguridad y prosperidad de nuestro país... Un Estado fallido en Venezuela amenaza la seguridad y la prosperidad de todo nuestro hemisferio y del pueblo de los Estados Unidos de América". Según Pence, una de las amenazas que supone el agravamiento de la realidad política venezolana es "un aumento del narcotráfico y del flujo de inmigrantes hacia EE.UU., dos factores que podrían comprometer nuestras fronteras, nuestra economía y, en algunos casos, comprometer la seguridad de nuestras familias y comunidades".
(Debemos hacer este obligado paréntesis para señalar, en virtud de lo expresado por el vicepresidente norteamericano, que la emigración venezolana a países capitalistas ha sido una "bendición de Dios". Podemos arribar a sugestivas conclusiones sólo con observar el crecimiento económico de los tres lugares favoritos de los expatriados: la ciudad de Miami en el estado de Florida (EE.UU.), Panamá y nuestro propio país. Ese crecimiento ha estado signado por el componente social que caracteriza el éxodo de venezolanos: en mayor proporción, quienes se han desplazado son oligarcas, burgueses y altos pequeños burgueses que han visto desaparecer los privilegios de los que disfrutaron por tantos años. En lenguaje común, la mayoría de los que han salido de Venezuela por el caos que ha creado Estados Unidos y la renuencia a aceptar un gobierno democrático que favorezca a los más necesitados es la que se tipifica como clase alta. "De primera" hubiese calificado Juan Bosch a los integrantes de esa mayoría con el incipiente conocimiento de las clases sociales que poseía en los años que, por la dictadura de Trujillo, vivió en el exilio, a décadas de estudiar a Marx y hacer de sus teorías formidables herramientas regionales).
Las experiencias de Siria y Libia han servido al Pentágono y a la CIA para la división y radicalización de la población venezolana, pero la misma cercanía de lo que podría constituirse en zona fértil para el terrorismo, si Estados Unidos hace con Venezuela lo que hizo con las dos naciones árabes, se convertiría en bumerán para su política intervencionista, y, por ende, para su propia seguridad. Aún bajo esta disyuntiva las posibilidades de una intervención son reales. Internamente, deben los revolucionarios venezolanos permanecer unidos y las fuerzas armadas estar dispuestas a defender la soberanía, sin resquebrajamientos, determinadas a honrar la solemnidad de Chávez: "Prefiero la muerte antes que la traición; así lo declaro ante el mundo y lo declaro ante Venezuela: no hay marcha atrás en la revolución política que tenemos que impulsar y que claman las calles del pueblo de toda esta tierra de Bolívar. Este proceso lleva su ritmo, y su marcha. No podemos frenarlo, mucho menos desviarlo de cauce para que dé vuelta sobre sí mismo y se hunda de nuevo. No lo vamos a permitir...".
La cohesión de las organizaciones revolucionarias y la supresión de cualquier disidencia dentro de los cuerpos armados desempeñan un papel disuasorio para las intenciones intervencionistas de los norteamericanos, que, muy oportunamente, en lo que concierne al "caso venezolano", han logrado incorporar a su agenda los gobiernos de los cinco países con los ejércitos más poderosos de América Latina: Brasil, México, Argentina, Perú y Colombia. La logística está montada y presta a erupcionar en cualquier momento. Los casos de Libia y Siria requirieron de cerca de dos lustros para el inicio de las acciones, por lo que no hay plazo definido para desestimar cualquier operación.
"La situación en Venezuela no representa amenaza para la paz y la seguridad de ningún país; los hechos que se desarrollan son asuntos internos y, por tanto, sacan el análisis del tema del Consejo de Seguridad", ha afirmado la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Debemos estimular, a nivel global, denuncias permanentes que obliguen a difundir las perversas intenciones del imperio, buscando, como expresara Fidel Castro refiriéndose a la paz y la integridad de Irak, "una batalla política y no militar. Si la verdad puede ser asegurada, y la mentira puede ser vencida, la paz en la región aún puede salvarse, con beneficio incluso para el propio pueblo de Estados Unidos. En esa guerra sólo ganarían los productores de armas o los que albergan el imposible sueño de que 6,300 millones de seres humanos, hambrientos y pobres en su inmensa mayoría, puedan gobernarse por la fuerza".
El canciller venezolano ha calificado las declaraciones de Donald Trump como "inamistosas y hostiles, a todas luces violatorias de lo contemplado en la Carta de la Organización de Naciones Unidas y en las normas del derecho internacional. Son declaraciones belicistas; Washington representa una amenaza directa contra la paz y la independencia de Venezuela. Las organizaciones internacionales y los foros multilaterales deben poner freno a la más agresiva acción del imperio estadounidense contra el pueblo venezolano en más de 100 años". De esta manera, y con persistencia, debe ser el discurso. Es necesario que desde cada rincón del planeta exijamos a Estados Unidos someterse a la legalidad. El método de lucha asumido por el líder de la Revolución Cubana durante las últimas décadas, gracias a la sabiduría que aportan los años, estuvo sustentado en el debate de las ideas. Ha sido, sin dudas, un extraordinario legado al que debemos recurrir en el mundo unipolar que nos dejó el derrumbe de la Unión Soviética.
Nemen Hazim
San Juan, Puerto Rico
18 de septiembre de 2017
Sobre el autor: Boschista, sin afiliación partidista. Luchador incansable contra las injusticias. Nació en San Pedro de Macorís, República Dominicana, el 20 de marzo de 1954. Graduó de Ingeniero Mecánico Electricista "Magna Cum Laude" en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, el 28 de octubre de 1977. Participó en importantes eventos mundiales y cursó estudios complementarios en Estados Unidos, Puerto Rico, Cuba, Argentina, República Dominicana y Uruguay. Fue Ayudante de Profesor en las asignaturas Mecánica Racional y Máquinas Eléctricas en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, de 1972 a 1976; Profesor de Circuitos Eléctricos y Director de las Escuelas de Ingeniería Eléctrica e Ingeniería Mecánica en la Universidad Central del Este, de 1980 a 1985. Ocupó diversos cargos en la Corporación Dominicana de Electricidad, empresa a la que ingresó en 1977 y de la que renunció, en noviembre de 1988, al cargo de Gerente de Turbinas de Gas y Motores Diésel. Radicó en Puerto Rico desde finales de 1988, trabajando para Ceisco Engineering como Ingeniero de Proyectos. En 1995, como copropietario, fundó Ingelmec, Inc., una compañía de Ingeniería Eléctrica que ejerció hasta el 31 de diciembre de 2012. Desde el 1 de enero de 2013 trabaja por cuenta propia.



Matías Bosch, Santo Domingo.
Trabaja en la Fundación Juan Bosch.
Miembro de un partido que no existe. Defensor de los derechos y la dignidad. Amante de lo bueno y hermoso.

"Me importa y me duele Cuba porque allí nací y formó mi ser; República Dominicana porque de aquí son mis ancestros y mis extensiones, aquí vivo y aquí lucho; Puerto Rico porque es la tierra de Hostos, Betances, Julia de Burgos, Mari Bras, y la tierra de mi bisabuela Ángela; Haití porque es la tierra donde vivió mi abuelo y nacieron dos de mis tíos abuelos, y es la tierra de mucha gente que ha luchado por la libertad; Granada porque fue la tierra de Maurice Bishop; Guadalupe porque es el lugar donde recibieron a mis abuelos después del golpe de Estado; Chile porque es la tierra de mi madre y adonde llegaron mis abuelos migrantes desde Europa; México porque es el lugar donde acogieron a mis padres luego del golpe de Pinochet...Amo a Venezuela por ser la patria de Bolívar y de tantos hermosos poetas. En fin, amo a demasiados lugares y de todos me siento parte. No puedo ponerle muros a mi corazón, ni alambres de púas electrificados a mi alma y a mi historia. "Yo vengo de todas partes y hacia todas partes voy. Soy arte en entre las artes y en los montes, monte soy".

"NI VIVOS NI MUERTOS SE LOGRARÁ DE NOSOTROS QUE CAMBIEMOS NUESTRA CONDUCTA".


Como le dijo Fidel a Chávez en 2002, Juan Bosch no renunció ni se dejó matar. Los golpistas lo tuvieron que hacer preso y deportar por la fuerza. Ese golpe de Estado ha marcado 54 años de historia de Rep. Dominicana.


Esta es la carta de Juan Bosch estando preso en el Palacio Nacional el 26 de septiembre de 1963:


"Carta de Juan Bosch al pueblo dominicano desde el confinamiento en 1963


Ni vivos ni muertos, ni en el poder ni en la calle se logrará de nosotros que cambiemos nuestra conducta. Nos hemos opuesto y nos opondremos siempre a los privilegios, al robo, a la persecución, a la tortura. Creemos en la libertad, en la dignidad y en el derecho del pueblo dominicano a vivir y a desarrollar su democracia con libertades humanas pero también con justicia social.


En siete meses de gobierno no hemos derramado una gota de sangre, ni hemos ordenado una tortura ni hemos aceptado que un centavo del pueblo fuera a parar a manos de ladrones.


Hemos permitido toda clase de libertades y hemos tolerado toda clase de insultos, porque la democracia debe ser tolerante; pero no hemos tolerado persecuciones, ni crímenes ni torturas ni huelgas ilegales, ni robos porque la democracia respeta al ser humano y exige que se respete el orden público y demanda honestidad.


Los hombres pueden caer, pero los principios no. Nosotros podemos caer, pero el pueblo no debe permitir que caiga la dignidad democrática. La democracia es un bien del pueblo y a él le toca defenderla. Mientras tanto, aquí estamos, dispuestos a seguir la voluntad del pueblo. Juan Bosch"


ESTO ES UNA MARAVILLA.... LA DECLARACIÓN A LA PRENSA DE CARMEN QUIDIELLO DE BOSCH, EN PUERTO RICO, EL 25 DE SEPTIEMBRE DE 1963 ANTE EL GOLPE DE ESTADO.






Mensaje al pueblo de la República Dominicana enviado por la señora del Presidente Bosch.


He escuchado atónita y casi sin poder creerlo la noticia de que ha habido un golpe de estado contra el gobierno constitucional de mi esposo en la República Dominicana. No tengo de momento mas noticia que esta escueta y que puede resultar trágica para la libertad de los dominicanos y para el respeto que cada miembro del pueblo dominicano se tiene a sí mismo como hombre y que cada mujer dominicana se tiene a sí misma como patriota.


Después de treinta y un años de dictadura bestial, sangrienta y ladrona, se estableció por fin un gobierno democrático a base de una libertad tan claramente, tan libremente expresada por el pueblo dominicano, por las gentes sencillas y sufridas de la República Dominicana, por la clase media, por los trabajadores, los comerciantes, los industriales, en fin, todas las fuerzas que componen el pueblo de la República Dominicana.


Es increíble que después de la dictadura sangrienta de una parte, y la gesta democrática tan contundente de los dominicanos por otra, pueda persistir un golpe de estado como el que se ha dado contra Juan Bosch, (Nota a mano: invocando un pretendido comunismo en el gabinete que preside mi esposo el legítimo Presidente de los dominicanos) la voz del pueblo dominicano, el brazo, la acción, el corazón, la voluntad y el valor del pueblo dominicano no se han expresado todavía en los momentos que hablo pero estoy segura, por el profundo respeto que a mí y a tantos en toda América le merece ese pueblo dominicano que esa voz, ese brazo, ese corazón, esa voluntad y ese valor habrán de expresarse con firmeza para no permitir que se deshonre la democracia en la República Dominicana, que se frustre el esfuerzo del pueblo dominicano por establecer su libertad, ni que se distorsione la figura del hombre cuya vida, consagrada a una lucha permanente a favor de la democracia, es el mayor mentís de los que con oportunismo y falacia lo han motejado como comunista y cuya especie, poniendo por testigo a América, repudio y desmiento de la forma más categórica.


Es el pueblo mismo al que le toca actuar, sencillamente, valerosamente, yéndose a las calles y negándose a moverse hasta que no se restituya la democracia que él mismo creó.


Yo estoy segura que el pueblo dominicano sabrá comportarse a la altura de su momento histórico tan trascendental y tan decisivo.


Pero no es el pueblo dominicano sólo. Porque la libertad es y debe ser indivisible en América. No se puede agredir la libertad de un pueblo sin que quede herida la libertad de todos los demás pueblos de América. Los gobiernos de América. Estados Unidos, Venezuela y otros, supieron poner sus barcos en defensa de la democracia en los horizontes de la República Dominicana para que se viera claramente en ellos la voluntad de que no se puede violar la democracia impunemente en América. Lo hicieron cuando fuerzas trujillistas, después de la desaparición, de la ejecución del dictador, trataron de volver a apoderarse del gobierno que le pertenece a todos en la República Dominicana y que debe ser para beneficio y honra del pueblo. Esta situación de ahora, la dictadura de 31 años, la democracia clara y contundente que ha creado el actual gobierno dan lugar a una situación en la República Dominicana que estoy segura los gobiernos y los pueblos de América tienen que atender. No está ni estará sólo el pueblo de la República Dominicana en defensa de su libertad: libertad que ha dura penas ha recuperado después de tantos años de haberla visto ultrajada, mancillada y deshonrada por el despotismo.


El pueblo dominicano, y todos los hombres libres de América al lado de él no pueden permitir que se destruya la libertad, la democracia que es el único bien que puede tener cualquier pueblo de hombres libres, la única protección que para sí mismo tiene siempre que preservar el pueblo dominicano. Yo hago un llamado a las madres, a las esposas, al valor de los hombres, a que responsablemente pero enérgicamente y sin ceder ni un ápice en las calles, en las plazas, en los campos, en los caminos de la República Dominicana opongan toda su fuerza y su voluntad a volver a entronizarse pisoteando la libertad de los dominicanos.


Resistencia es la Consigna, resistencia consciente, pero inconmovible para defender el derecho que no podemos perder, el derecho a la democracia, a vivir en libertad y con dignidad.






Por Iván Gatón, Santo Domingo.


El Catedrático Ivän Gatón en su intervención del Programa Matinal de AN7 dijo que el ex presidente Barak Obama aportaba mil millones de pesos cada año al conflicto bélico Sirio. Especialísta en Relaciones Internacionales.


Fue hace ya tres años, cuando el 22 de junio de 2012 el presidente Fernando Lugo -perteneciente al entorno de la teología de la liberación- fue destituido de su cargo. En aquel entonces los vecinos latinoamericanos reaccionaron de manera dura y excluyeron a Paraguay de la alianza regional Mercosur. La razón fue que la destitución repentina, que según la opinión generalizada de los expertos en el tema violó la Constitución, estuvo muy cerca de haber sido un golpe de Estado; lo que no impidió que el antiguo ministro de desarrollo alemán del Partido Demócrata Liberal lo saludara explícitamente. El factor desencadenante de la polémica maniobra que llevó a la toma del poder por el partido conservador Colorado fue una acción violenta de la policía contra una ocupación de tierra en la provincia de Curuguaty, donde murieron once campesinos y seis agentes de policía.


Esta semana se supone que habrá un proceso por aquellos sucesos: ¿le sorprende a alguien que dicho proceso se dirija únicamente hacia los que ocuparon las tierras y no contra los responsables policiales? Son ONGs alemanas y latinoamericanas las que critican las investigaciones unilaterales y deficientes de la fiscalía. El propio punto de arranque de la acción policial es muy dudoso, ya que el título de la tierra de la cual se intentó expulsar a las personas que ocuparon es altamente cuestionable en sí. Los indicios presentados en contra de los denunciados en el proceso son dudosos. Incluso se afirma que algunos ni siquiera estuvieron en la escena del crimen. A ello se suma que defensores de los derechos humanos critican el aumento de la represión: se habla de torturas y ejecuciones extralegales contra las personas que luchan por sus tierras. Porque de eso se trata: del acceso a la tierra que en sí misma ya está distribuida de manera injusta en Paraguay. La tierra está en las manos de unos cuantos, quienes la utilizan como una inmensa plantación para bienes de exportación como el maíz, la caña de azúcar y la soja, los cuales suelen ser sembrados mediante el uso de pesticidas venenosos.


Hace un tiempo hablé con los abogados defensores de los campesinos; colegas comprometidos con la lucha contra una justicia todopoderosa e injusta que, por su esfuerzo, terminaron en el punto de mira del aparato represor. En Paraguay existe con total impunidad una cadena sin fin de asalto y asesinatos hacia la mayoría indígena. Y todo ello, sin que Alemania y la Unión Europea tomen posición en contra de las constantes violaciones de los derechos humanos que allí se producen. Incluso premian la "creatividad de los políticos para engañar a la democracia y (…) aparecer como sus guardianes“, tal y como escribió Josef Oehrlein con respecto al derrocamiento del presidente Lugo. Una expresión que también podría valer para el golpe de Estado contra el gobierno izquierdista de Manuel Zelaya en Honduras en 2009, debido a que la situación de los derechos humanos ha empeorado drásticamente en este país.


Este jueves se cumplen cinco años desde que se transgredió el orden constitucional en Paraguay a través de un denominado juicio exprés donde fue destituido el presidente Fernando Lugo.


Bajo los cargos de "mal desempeño en sus funciones" y una masacre sobre sus hombres (Curuguaty), Fernando Lugo, quien asumió la presidencia de Paraguay el 20 de abril de 2008, se vio obligado a dejar el cargo como mandatario de esa nación el 22 de junio de 2012 por un juicio político calificado de exprés e impulsado por la oposición.


"Hubo un golpe de Estado parlamentario en el que los argumentos para un juicio político no tienen ningún valor y fueron rebatidos ampliamente por los defensores", denunció para el 2012 el Presidente Constitucional de Paraguay, Fernando Lugo.






"Han destituido a la democracia del Paraguay".






Lugo fue apartado del cargo a pedido de la Cámara de Diputados (instancia acusadora). Por mayoría (76 votos contra 1), la Cámara Baja aprobó el libelo acusatorio para someterlo a juicio político.


>> Fernando Lugo elegido como presidente del Senado en Paraguay


Federico Franco, quien era el vicepresidente de Lugo, fue el que asumió ilegalmente la presidencia de la República tras el golpe parlamentario.


Franco, abrió una línea de Gobierno que sería profundizada por el actual mandatario, Horacio Cartes, con el creciente endeudamiento a través de los “bonos soberanos” y la acelerada liberación de productos transgénicos sin seguir los protocolos establecidos en la ley. Su gestión terminó como una de las más impopulares de la llamada “transición democrática” y que estuvo sumida por múltiples escándalos de corrupción.


Todavía las secuelas de golpe se siguen manifestando con un gobierno que ha acumulado poderes inconstitucionales y que continúa el patrón represivo contra los grupos organizados.


>> Realizan vigilia en Palacio de Justicia de Paraguay en rechazo a condena de campesinos


Luego de estar en silencio, Fernando Lugo volvió a la política en el año 2013 y ocupa actualmente un lugar en el Senado por el partido Frente Guasú, hasta el 2018.


El golpe de estado parlamentario a Lugo formo parte de la nueva estrategia impulsada por Estados Unidos para el restablecimiento de la derecha neoliberal en la región, al igual que el juicio parlamentario en Brasil y que llevo a la destitución de Dilma Rousseff.


Bolonio Medina

Lic. En Derecho de la UASD, Especializado en Derecho Internacional

y Relaciones Internacionales.

La guerra mediática.-

Es la guerra basada en los principios de la guerra psicológica que tiene como objetivo principal desestabilizar a los gobiernos y jefes de Estado, cuyas autoridades son consideradas opuestas o no alineadas con las políticas del atacante, los cuales son puestos en las listas negras de este, con la finalidad de provocar la salida del poder de esos líderes políticos, mediante la implementación de un Golpe de estado.

Este mecanismo de confrontación está basado en las técnicas aplicadas por los Estados Unidos en distintos escenarios de conflictos.

Ya no se trata solo de movimientos de tropas, uso de armas de grueso calibre, instalación en otros países, etc., sino de organizaciones conformadas por grupos de intereses económicos, sociales y políticos que deciden por conveniencias una unificación para la acción: que se publica o no se publica en sus medios, siguiendo orientaciones y lineamientos ideológicos del Poder Político; que en nuestros casos resulta a ser el poder del Imperialismo o más bien, del pentagonismo.

Los medios, siguiendo el guion trazado no te dispararan con la armas; ahora disparan a tu cerebro para controlarlo, a tu mente hasta vencerla logrando que cambies de opinión acerca del tema de su interés y poniendo al ciudadano en condiciones de actuar en contra de sus propios intereses; facilitando la destrucción de los líderes que te representan en tus correctos intereses.


La Guerra Mediática encaja perfectamente como parte de primer orden en la llamada Guerras de Cuarta Generación: una denominación dentro de la doctrina militar estadounidense que comprende a la Guerra de guerrillas, la Guerra asimétrica, la Guerra Sucia, el Terrorismo de Estado u operaciones similares y encubiertas, la Guerra popular, el Terrorismo y el Contraterrorismo; en las que juega un papel muy importante la Propaganda o Guerra mediática. En este tipo de guerras no hay enfrentamiento entre ejércitos regulares ni necesariamente entre Estados, sino entre un estado y grupos políticos o mayormente entre grupos violentos de naturaleza política, económica, religiosa o étnica, contra un estado.


A tales fines, a través de organismos diversos del Estado que se oculta detrás de la agresión a otro estado, se financian acciones de protestas justificadas o no en acciones o en falta de acciones desde el Poder del Estado agredido: protestas civiles pacificas en principio, en la que se denuncia al o los líderes políticos que se interesa destruir; esas denuncias van a ir calando en el sentir popular y escalando en la gravedad de las acusaciones que desde las protestas se hagan; sin importar que sean o no ciertas la Guerra Mediática a través de los Medios de Comunicación comprometidos en contra del Estado agredido la darán como muy cierta y reales, y hasta harán videos y fotografías que justificaran la certeza de cualquier mentira.


De esta manera se comenzaran a justificar acciones más y más contundentes de los que protestan hasta llegar a la violencia extrema en a las que se ejecutan acciones de vandalismos, saqueos, asesinatos y muertes y heridas de uno y otro lado de las que los Medios atribuirán toda culpa a las autoridades del Estado agredido; y entre mentiras y verdades construirán una única idea conclusiva: que es necesario que quienes gobiernan dejen el Poder Político como forma de parar las protestas violentas de la “sociedad”. Una manera barata de dar un Golpe de Estado salir de un gobierno incomodo que no se alineó con los intereses imperiales del agresor.


Para nosotros los dominicanos, que compartimos una gran amistad histórica de solidaridad con el Pueblo Hermano de Venezuela, que en cierto modo hemos compartido y vivido juntos las envestidas imperialistas o pentagonistas, nos resulta harto desagradable la envestida mediática en contra del Gobierno Socialista de Venezuela; envestida que nos traen medios de los EE.UU como CNN en Español, que juntos a otros no menos importantes hacen ecos en los medios nacionales, unos comprometidos y otros producto, tal vez de la ignorancia y mala costumbre de repetir lo que dicen los medios internacionales, por carecer de una formación que proporcione a muchos de nuestros comunicadores una visión crítica de la realidad del mundo político de hoy y de sus intereses.


La Guerra Mediática nos está condicionando a nosotros cada día de que “la única verdad es la mentira”. Con razón se ha dicho que en las Guerras la primera víctima es la verdad y Venezuela es un ejemplo: Cosechando éxitos año tras año reconocidos por los organismos internacionales como son los de la reducción de la pobreza extrema, disminución de la mortalidad infantil, logros extraordinarios en la mejoría de la vivienda; nada de eso es noticia para los medios de la Guerra Mediática, para quienes, solo es válido que el Poder Político les sea cedido a un grupo de políticos opositores que no lo han ganado.


Para la Guerra Mediática en contra del pueblo de Venezuela, allí no hay democracia, y ocultan sin ningún desenfado, la represión por la que atraviesa el pueblo mexicano, para solo poner un ejemplo, en el que desaparecen en grupos las gentes del pueblo a manos de organismos estatales, sin que se diga o se haga nada para hacer justicia: Basta solo con recordar la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, desaparecidos y silenciados para siempre.

iii Viva la Revolución Socialista Bolivariana de Venezuela !!!

iii Viva el Pueblo de Venezuela junto a la Patria Grande !!!
Juan Polanco, Santiago, R.D.

Joven de Santiago, 21 años. Maestro y Escritor. Un Lector empedernido. Un revolucionario.

“Ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica.”

El presidente Nicolás Maduro decidió enviar el miércoles 13 una representación de su gobierno a dialogar en la República Dominicana, junto con una representación de la oposición venezolana. Por parte del gobierno dominicano, estuvieron presentes el presidente Danilo Medina y Miguel Vargas Maldonado, canciller del país. También estuvo presente José Luis Rodríguez Zapatero, quien fue presidente de España desde el año 2004 hasta el 2011.

Desde Venezuela llegó Delcy Rodríguez, presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente, Jorge Rodríguez Gómez, alcalde del municipio Libertador de Caracas, Roy Chardeton, asesor de cancillería, y Alí de Jesús Uzcátegui, embajador de Venezuela en el país.

Por parte de la oposición venezolana estuvo presente el presidente del Parlamento de Venezuela, Julio Borges, de Primero Justicia. Además de él, participaron Eudoro González, de Primero Justicia; Luis Florido, de Voluntad Popular; Timoteo Zambrano, del partido Un Nuevo Tiempo, entre otros.

Fue una nueva oportunidad para la reconciliación que necesita Venezuela hoy en día. El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, calificó como positivo esta acción del gobierno dominicano. Manifestó que este fue un buen momento para mostrar un compromiso real y sincero con los problemas que frente hoy en día Venezuela.

La Mesa de la Unidad Democrático envió representantes al país a dialogar y desde que llegaron fue a ponerle condiciones al gobierno dominicano. Julio Borges publicó un mensaje en Twitter, diciendo lo siguiente: “Reiteramos a Danilo Medina y Antonio Guterres que no hay diálogo hasta que se cumplan las condiciones y haya acompañamiento internacional”. O sea, que no ha sido prudente de ocultar que ha venido a negociar la paz de Venezuela.

El miércoles 13 de septiembre, el Parlamento Europeo aprobó una resolución de sanciones contra Venezuela. Dicho documento contó con un respaldo de 526 votos, 96 en contra y 59 se abstuvieron. Además de eso, los eurodiputados también rechazaron la Asamblea Nacional Constituyente y manifestaron que no lo apoyan.

Es indudable que la oposición de Venezuela ha querido rechazar un diálogo con el gobierno venezolano. Debido a la victoria del oficialismo que representa Nicolás Maduro en la Constituyente, ambos han tenido que retomar las conversaciones para la paz como para evitar las sanciones europeas. Resulta ilógico que diversos gobiernos del continente europeo tengan que adoptar sanciones económicas y diplomáticas contra el gobierno venezolana, pese a ser el mejor momento para que se lleguen a acuerdos a través de un diálogo.

Es importante resaltar los grandes aportes que ha hecho el expresidente Leonel Fernández, a través de la Fundación Global Democracia y Desarrollo, que es presidida por el político ya mencionado. Él ha ofrecido diversos mecanismos como garantía de un buen cumplimiento de acuerdos en busca de una salida pacífica a la situación de los venezolanos.

Venezuela está siendo arropada por una crisis política, social y económica, por lo que se valora la disposición de la República Dominicana para ser sede del encuentro entre representantes del gobierno venezolano y la oposición de dicho país. Esto, de manera histórica, se verá como la unidad que soñó Simón Bolívar, Eugenio María de Hostos, José Martí y otros antillanos de la historia. Por eso, ellos necesitan y quieren Paz.

Parte 2.

El proceso de diálogo siguió el viernes 15 de septiembre, incluso fuera de la República Dominicana. Pues la presidente de la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, Delcy Rodríguez, se reunió con una delegación del Parlamento de Mercosur, encabeza por su presidente, el brasileño Arlindo Chinaglia.

Es importante resaltar que el Mercosur ha estado atento a la situación venezolana sobre el alto índice de delincuencia y también acerca de la violación de los derechos ocurridos durante todo el año 2017. También han valorado el diálogo que impulsó el gobierno de Nicolás Maduro con la oposición venezolana.

La presidenta de la ANC agradeció humildemente la disposición que ha mostrado el gobierno dominicano por su respaldo al diálogo por la paz en Venezuela. El eje central de eso fue restaurar los problemas y los puntos distintos que emergen cada día entre el Gobierno y la oposición de Venezuela, que al final de todos afecta de manera directa a la sociedad venezolana.

El jueves 14 de septiembre se llevó a cabo en la República Dominicana el segundo diálogo entre ambas representaciones venezolanas, con el objetivo de implantar soluciones pacíficas para la crisis económica y social que atraviesa dicho país suramericano. Por insólito que parezca, los representantes de la oposición dejó en espera por unas largas horas el miércoles 13 a los mediadores, con la excusa de que no cumplirían las condiciones que impusieron y que era necesario una supervisión internacional.

Fue hasta el día siguiente que pudieron reunirse de manera oficial en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores, donde se posibilitó un espacio de diálogo entre el Gobierno de Venezuela y la oposición. Ellos, junto al gobierno dominicano, acordaron sostener un tercer encuentro para el próximo 27 de septiembre con la participación de otros países de América Latina.

En la actualidad la oposición venezolana se encuentra en un proceso de crisis, reflejándose la misma en las elecciones primarias que mantuvo la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) el pasado domingo 10 de septiembre. El partido que resultó ganador fue Acción Democrática.

No se registró alguna victoria al partido Voluntad Popular, que lidera el opositor Leopoldo López. Desde que se concluyó las elecciones para elegir la Asamblea Nacional Constituyente y cuando Lilian Tintori fue encontrada con una cantidad de dinero muy alta para las “medicinas” de su abuela, ambos han pedido una credibilidad enorme entre los venezolanos. Después de, ahora el opositor venezolano más respetado es Ramos Allup, quien fue presidente de la Asamblea Nacional entre 2016 y 2017.

Entiendo que la oposición venezolana debe acoger la democracia respetando el orden constitucional y estableciendo obstáculos a conspiración contraria al gobierno. En cambio esto, considero que el oficialismo de Nicolás Maduro debe pautar lineamientos de gobierno que pueda establecer bienestar social en toda la sociedad dominicana.

“Mantengo el punto de vista que diversos dirigentes venezolanos deben parar de jugar con la soberanía de su propio pueblo. Los asuntos de Venezuela deben ser resueltos de manera interna, sin injerencia de organismos internacionales. Nicolás Maduro, junto a su gabinete, debe respetar también la Constitución venezolana, que además es considerada como una de las mejores en América.

Cuando esto se logre en ambas partes, estimo que la paz de Venezuela podría llegar de manera repentina y sería a largo plazo, obviando los intereses particulares que mantienen ambos bloques por encima de un cúmulo mayoritario. ¡Qué viva Venezuela, la Patria de Simón Bolívar!” Juan Polanco.

Actividad Grupo de Dominicanos por la Unidad Latinoamericana y Caribeña.

El Grupo de Dominicanos por la Unidad Latinoamericana y Caribeña que coordina Mencía Ortíz, está compuesto por personas dominicanas que influencian a través de las redes sociales y otros medios de comunicación difundiendo informaciones y enfoques a favor de la unidad regional de Latinoamérica y el Caribe.

Promovemos el respeto a la soberanía de los pueblos hermanos y en esta ocasión de el pueblo de Venezuela en la presente crisis que atraviesa, por causa de la guerra económica y mediática en que está envuelta.

El objetivo de este grupo es generar un contrapeso de información en la opinión pública en torno a los temas vinculados a la problemática actual de este país hermano.

La invitación es abierta a participar de un panel de ensayos sobre los siguientes temas:

1. Importancia de la Unidad Regional Latinoamericana.
2. Guerra Mediática y Guerra Económica contra Venezuela.
3. Amenazas para la región LA y Caribeña de una intervención militar de EEUU en Venezuela.

La dinámica del panel será la exposición resumida de cada uno de estos ensayos por panelistas invitados miembros del grupo.

A continuación tendremos un tiempo de preguntas y respuestas de los asistentes para realizar un conversatorio que será la primera de muchas actividades que realizaremos con el fin de crear conciencia sobre la importancia de la unidad y la solidaridad entre pueblos hermanos.

Estaremos promoviendo la unidad regional y temas comunes a la agenda de desarrollo de América Latina y el Caribe. Registro Gratis.

viernes, 16 de junio de 2017

A donde nos llevan Los Verdes?

La República Dominicana en la actualidad vive un momento histórico, los retos que enfrenta nuestra clase política no tienen precedentes frente a la nueva sociedad que surge después de 1990 con la caída del muro de Berlín.

Es la causa principal de una obligada evolución de la clase política y sus liderazgos tradicionales que se formaron en la guerra fría. Estos están siendo cuestionados por una sociedad empoderada por la tecnología así como por el estado de derechos que surge en la posguerra.


Los reclamos de transparencia como valor social, las manifestaciones de protesta ciudadana, la participación cívica por medio del activismo en redes sociales y el uso de las marchas para generar presión social deben ser como parte de un proceso normal en este nuevo paradigma.   

Ante estos nuevos retos surge un escenario transitorio y circunstancial pero que sin dudas marcará un antes y un después para la sociedad dominicana por el impacto del caso de corrupción de mas trascendencia en la historia de América Latina, el caso de ODEBRECH. 

La reacción de la sociedad ante el escándalo internacional ha resultado en una indignación generalizada de gran parte de la sociedad dominicana, liderada por la clase media y media alta empoderada que se ha expresado a través de un grupo de organizaciones diversas de la sociedad civil y partidos de oposición denominada "LA MARCHA VERDE".

En un hecho sin precedentes nuestra sociedad decide movilizarse y expresarse en las calles por medio  de una amalgama de representación cívica de diversidad ideológica que por primera vez se han unido para reclamar el "Fin de la Impunidad".


Al cabo de varias marchas y un gran activismo en las redes sociales y medios de comunicación de masas, este movimiento a logrado posicionarse como instrumento de presión social de gran impacto en las decisiones del poder político en nuestro país.

Actualmente el gobierno del Presidente Medina luce acorralado y abrumado por los hechos generando un estado de condena anticipada de la sociedad frente a la difusión de informaciones que comprometen y cuestionan a importantes actores del poder legislativo, el tren gubernamental e incluso la clase política dominicana completa.

Ante esta ola de reclamo de transparencia y el estado de indignación generado por ese movimiento, la sociedad dominicana luce unida en cuanto al justo reclamo de acabar con la corrupción y la impunidad que tradicionalmente a caracterizado nuestro sistema político en las ultimas décadas. 

La sociedad expresa su identificación con esos nobles objetivos y aspiraciones que reclama el movimiento verde con sus consignas, movilizaciones que han logrado una reacción del poder político: La Procuraduría General de la República ha sometido a la justicia a 14 personas encartadas en el caso y el Juez Ortega ha dictado las mas estrictas medidas de coerción para los acusados.

Ninguna de las medidas asumidas por el gobierno parecen satisfacer al colectivo y pareciera una especie de sanguijuela insaciable que mientras mas se le complace mas reclama y mas fuerza exhibe.

En este momento la temperatura social puede medirse al interaccionar en las redes en una presión social dirigida a acentuar una división de la población entre buenos y malos, verdes y morados.

Frente a la tensión diaria que experimenta un ciudadano común esta el evitar por todos los medios expresar cualquier idea que salga del guión mediático o el discurso difundido por ese movimiento.  

Una especie de dictadura, de censura previa o chantaje que condiciona obliga al que se expresa a usar ciertos códigos de identificación obligatoria para señalar su apoyo a esta moda verde. 

La expresión pública y el activismo del movimiento verde genera una presión social en la población y en todos los actores de la sociedad, el que no se identifica con el movimiento verde es juzgado o señalado duramente como un corrupto o un cómplice aunque nada tenga que ver con el caso. 

Así mismo cualquiera que se refiere a algún aspecto positivo de las acciones del gobierno e incluso muestra satisfacción por la respuesta de las autoridades la respuesta de estos activistas no da tregua para insultar o descalificar a quien libremente expresa su parecer. 

Las acusaciones alegres, las agresiones y difusión de información falsa y manipulada reina en el espectro web alimentando las pasiones o exacerbando a la población con discursos de barricada que piden desde la renuncia del presidente hasta lanzarse a las calles.

En medio de toda esta amalgama de presión social, de evidentes fuerzas externas a nuestro país, se toman día a día decisiones que tendrán un impacto de alcance todavía no calculado en términos de sus consecuencias para nuestra estabilidad social, económica y financiera.

De momento hay una decisión de presionar constantemente cada parte del proceso en una suerte de vigilancia social a cada etapa del proceso judicial del caso odebrech. Hasta el momento no se visualiza un desenlace y un balance claro de que lograremos al final de la jornada, sin animo pesimista debo confesar que me preocupa ese nivel de incertidumbre.

Las razones para preocuparse son muchas en primer lugar porque hemos sido excitados y compelidos a marchar impulsados por la emoción y no por la razón. 

A partir de un abordaje politizado del tema de la corrupción y peligrosamente enfocado a un tipo de corrupción, obviando al menos en el discurso práctico otras modalidades vinculantes a ese mal social.

Ahora que la organización marcha verde se ha posicionado logrando fuerza social de importancia como para presionar al gobierno y sus instituciones incluso a sobre actuar con medidas populistas o decisiones complacientes mas allá de lo establecido por las leyes o la prudencia política.

Es saludable preguntar:
A donde nos llevan Los Verdes? 

Es sencilla esa pregunta, pero ante la falta de respuesta o la total ausencia de prepuestas claras les dejo para reflexionar a aquellos que a parte de emoción prefieren usar la razón. 
    
Mencía Ortíz

jueves, 30 de marzo de 2017

RD: Protestas y Propuestas.

La República Dominicana está avanzando en su madurez cívica y despertando al entendimiento de que tiene una voz para demandar en el contexto democrático. 

Una conducta muy determinada de quienes dirigen movimientos con el propósito de institucionalizar esa voz al rededor de reclamos nobles y colectivos.  

Con el fin de la guerra fría y la aparición de la red Internet el empoderamiento ciudadano logró herramientas eficientes para manifestar su aprobación o su rechazo a cualquier medida y en tiempo real.

Tenemos una sociedad que celebra la protesta pacífica y la disfruta como un alegre carnaval al experimentar sus beneficios intrínsecos que produce dado nuestro trauma histórico por la dictadura, al salir a las calles sin esos miedos ancestrales a la represión se genera una satisfacción terapéutica para algunas generaciones que no pudieron disfrutar esa experiencia.  

Nuestra sociedad reacciona con emoción al descubrir el sabor de la libre expresión de su pensamiento de forma colectiva en las redes sociales y el sentir que ahora pueden confrontar en un plano de igualdad a sus gobernantes se sienten empoderados.

Al contemplar este escenario no puedo mas que felicitar a mi sociedad y apoyar su valentía, dándole algunas exhortaciones pertinentes para que ese poder ciudadano trascienda mas allá de una moda pasajera.

Es importante acompañar la protesta de las propuestas que contengan soluciones viables y realistas. Cada vez más es necesario entender lo que ese poder significa, el compromiso por las luchas de bien colectivo no son un carnaval, son la esencia misma de la verdadera política. 

Encarnar un sentimiento colectivo, arengarlo, liderarlo, es fácil en esta sociedad cuando se juntan una serie de factores detonantes. 

La estructura básica para convertir la indignación social en un combustible para la protesta es formidable y eficiente, el uso de las redes sociales es una tendencia mundial propia del estado de derechos y del ciclo de paz mundial que surge después del 1990. 

Al analizar sin prejuicios los movimientos de protesta de la llamada marcha verde, podemos concluir que estamos frente a una nuevo paradigma de protesta y de lucha social en la República Dominicana. 

El éxito de la convocatoria y los efectos que tienen estas manifestaciones en nuestro país tienen a muchos sectores entusiasmados e ilusionados por distintas razones, según este movimiento coincida con sus objetivos.  

La existencia de un noble reclamo, la ausencia de un líder identificado como cabeza del movimiento le concede una vida útil llena de futuro y de incertidumbre, porque su fortaleza es su debilidad. 

Seguimos como sociedad en un proceso de transformación que este tipo de fenómeno contribuye a acelerar sin que podamos visualizar en el corto plazo el efecto tangible de esas protestas.

Un pueblo polarizado al rededor de dos grupos, un grupo se enfoca en la protesta, otros trabajan en elaborar propuestas. Ambos grupos tienen objetivos comunes pero estrategias distintas de como lograr los objetivos. 

La realidad es que el país sólo puede avanzar hacia adelante cuando la protesta sea acompañada de propuestas, realistas, prácticas, fruto del estudio, del consenso entre los intereses en conflicto. 

La presión social mal enfocada puede generar la perdida de la paz social y con ella la inestabilidad política que deviene en una debacle de la economía en niveles indeseados.

Es imposible obtener orden del desorden, lograr avances retrocediendo, obtener una nueva sociedad destruyendo la que tenemos. 

Los modelos y los ejemplos que tenemos de como logran los pueblos surgir aún de las cenizas para encabezar niveles importantes de desarrollo no son fórmulas mágicas de las que podemos seleccionar la parte que nos guste y desechar el resto.

La política como ciencia no improvisa sus acciones, cuando se trata de luchas por mantener el poder nuestro liderazgo nacional puede gestionar cualquier proceso de demanda social con relativo éxito, nuestro gobierno tiene las habilidades, experiencia y recursos para campear el temporal.

La sociedad puede continuar fortaleciendo sus medios de protesta pacífica si logra cuidar la vulnerabilidad de aquellos que organizan sus manifestaciones, evitando se politicen las protestas y pierdan credibilidad frente a la población en general. 

Debemos asumir y trabajar en la elaboración de propuestas, de soluciones que respondan a un visión integral donde prime el interés en el colectivo, desde una trinchera de lucha que garantice la preservación de lo que ya hemos logrado.

Un ejercicio racional impone la creación de espacios de discusión y evaluación orientado a las soluciones en vez de a mover las emociones sin un propósito tangible mas allá de satisfacer una supuesta sed de justicia que por selectiva es deshonesta.

Hay que apreciar y valorar nuestros pequeños avances cívicos al abrazar la protesta pacífica, a la espera de que nuestro liderazgo político asuma un postura receptiva y consistente ante la nobleza de los reclamos sin aferrarse torpemente a la paranoia política para descalificarla.


Mencía Ortíz           




  

martes, 28 de febrero de 2017

Urgente otra Revolución e Independencia en RD.

Al conmemorarse el aniversario de nuestra independencia, surge en mi mente la necesidad de actualizar este hecho histórico revisando su impacto en la actualidad política que vivimos como nación. 

El hecho que celebramos, es un legado histórico de los llamados padres de la patria. El noble sueño de Juan Pablo Duarte, al día de hoy todavía esta incompleto y pendiente en la república dominicana, pues su sueño de liberación, sin lugar a dudas tenía un alcance mas allá de la dominación o invasión territorial y política. 

El sueño de independencia y el concepto de patria tiene mucho contenido vinculado al desarrollo humano y a la realización de un estado estructurado en la autonomía de un de una serie de libertades amparadas en unos estándares de justicia y de equidad social.  

La soberanía de un país es una meta noble pero, cuando esta se ejerce bajo algún tipo de sumisión o esclavitud en aspectos vinculantes a su desarrollo queda en un plano de relatividad el logro de su independencia.

Hasta que punto nos hemos conformado con una soberanía y una libertad tan relativa. 
Creo que es hora de proponer una nueva lucha por la liberación, esta vez en busca de lograr la independencia que concede el desarrollo integral como nación.

La sumisión que tenemos hoy a un sistema educativo obsoleto, un sistema de seguridad del siglo pasado sin vocación de avance, un sistema democrático soportado en la fragilidad institucional y la espera por una ley de partidos que garantice realmente la competencia electoral. 

Con un sistema de justicia dependiente, un gobierno convenientemente análogo, un liderazgo económico conservador, mediocre e irresponsable, una sociedad apática de su ante sus más elementales deberes ciudadanos, que apenas descubre que tiene una voz y ya se cree con el poder de poner las reglas.  

Solo por citar algunos de los múltiples diagnósticos que he realizado a los pilares donde descansa el desarrollo humano en República Dominicana, debo arribar a concluir que es oportuno y propicio el momento para iniciar una verdadera revolución.

La revolución que propongo a cada ciudadano, es distinta a la que fue necesaria en los días de Duarte, es la revolución de las ideas, la única posible en el ciclo de paz mundial que vivimos, la única sostenible en la era del conocimiento. 

Urge iniciar por un cambio de actitud que pase de la protesta a la propuesta, para enfrentar el gran invasor y el opresor de nuestra patria, que no pertenece a partidos, que no ostenta el poder, si no que radica dentro de nosotros mismos.

Nosotros que insistimos en reaccionar emocionalmente como sociedad como niños de primera infancia haciendo berrinches y gritando a nuestros padres porque tenemos hambre y no sabemos hablar todavía.

Debemos declararnos en guerra contra el estancamiento que producen los liderazgos conservadores que en nuestra sociedad están representados al igual que en todo el mundo por las familias que desde siempre se amparan en la clase política de turno para continuar acumulando capitales. 

Los que nos escogen un enemigo político para distraer nuestros ojos de nuestro verdadero verdugo, esos que detienen y retrasan nuestro mayor reto que es lograr la independencia del subdesarrollo.

Los grandes pasos que debemos dar como sociedad, no demandan de los ciudadanos grandes conspiraciones, invocar la anarquía, exacerbar las pasiones con irresponsable fervor llamando a las calles o a tomar las armas. 

Las armas de esta guerra están disponibles recorriendo caminos que otros pueblos hermanos han recorrido.  La presión social juega sin dudas un papel y es el gran catalizador de los cambios sin embargo, es en la innovación, actualización, investigación, donde encontraremos el camino. 

La independencia que produce el conocimiento es más revolucionaria que cualquier fuerza social o política. La objetividad que produce procesar toda la información disponible sin los prejuicios de la pasión sectárea que nos nubla, ese es el camino. 

Una formidable masa planteando o demandando consistentemente pero sin una visión clara, actualizada de que queremos y como lo queremos. Sin el respeto por un plan de largo plazo consensuado por todos los sectores de nuestra sociedad estamos perdidos.  

En medio de este concierto de expresiones libres e independientes no es posible escuchar la voz de una conciencia de lo que es realmente una patria. 

Antes de lanzarnos a esta revolución que propongo debemos ver nuestra necesidad de enfrentar el mayor de los opresores nuestro estado de pobreza material, nuestro más grande enemigo el sub-desarrollo y el mayor obstáculo a vencer, nuestra ignorancia.  

Mencía Ortíz.




jueves, 9 de febrero de 2017

Sociedad Y Liderazgo Político Dominicano.

La sociedad dominicana avanza hacia a la madurez política con lentitud, pero avanza. Cada vez más estimulada por los cambios mundiales, el nacimiento de una nueva sociedad que muestra señales alentadoras augurando un progreso significativo hacia la madurez política de los ciudadanos. 

Esa madurez representa un gran reto para el liderazgo político, que no refleja en su accionar estar a la altura de las nuevas expectativas de esa nueva sociedad. 

Al recibir los embates de las demandas sociales por la transparencia, el liderazgo político responde con juegos infantiles, cuentos e historias, evasivas, teatros de títeres y manejos oscuros, de espaldas al pueblo. 

La sociedad dominicana y sus líderes políticos, parecen de esas parejas con mucha diferencia de edad, donde se generan conflictos por los intereses distintos, por la agendas o por los métodos de hacer las cosas.

La creciente ola de conciencia ciudadana que demanda la transparencia, no era posible se produjera antes de 1990 pero el mundo ha cambiado bruscamente desde entonces, como plantean los Fundamentos de Liderazgo Responsable y ese cambio transformó los gobernados, pero no acaba de impactar lo suficiente a los gobernantes.

Manifestaciones como el #22E podían prevenirse fácilmente con un mínimo de conciencia sobre los cambios sociales que genera el llamado ciclo de paz mundial que plantean los fundamentos de #liderazgoresponsable. Aunque estas hipótesis no pretenden ser un oráculo para predecir el futuro, sus planteamientos explican estos procesos y pueden ofrecer un clara perspectiva del comportamiento de esa nueva sociedad que plantea. 

La realidad de un liderazgo político ignorante del cambio estructural de esa sociedad en términos de nuevos paradigmas de interacción junto al impacto y alcance de esta transformación, ha generado nuevos esquemas de organización. 

Una sociedad empoderada con acceso a la tecnología y a medios de expresión ciudadana en un clima de libertad de expresión, en un clima de paz, democracia y estado de derechos.

"Este nuevo perfil ciudadano votante/consumidor el que reclama de sus líderes políticos, religiosos y económicos, un comportamiento responsable por encima del cargo, del rango, la sotana, el apellido o el titulo nobiliario, porque sabe que tiene en sus manos el poder de cambiar, en cualquier momento, de representante o de proveedor." #Liderazgoresponsable.

Mas que temer, el liderazgo político dominicano necesita ponerse al día, ubicarse, enterarse, despertar y madurar, ante el hecho consumado de esa nueva sociedad. 

La presión por sobrevivir y por mantenerse en una posición de poder, debe ser el catalizador para desaprender y reaprender a dirigir esa nueva sociedad. Desde una posición privilegiada que ella le otorga con generosidad y desprendimiento ofrecer la transparencia antes que le sea demandada.

Quienes dirigen políticamente nuestra nación, en lugar de responder haciendo equilibrio o haciendo comparaciones inútiles para distraer del foco del problema, en vez de desafiar toda lógica, imponer una conducta errática y justificar lo injustificable, es hora de responder con la misma madurez que hoy lo hace la sociedad dominicana.

Generar cambios reales a nivel institucional, dar señales claras de que se esta poniendo el oído en el corazón del pueblo. Asumir de una vez propuestas revolucionarias como #gobiernoelectrónico o #revisióndepatrimonio para satisfacer las expectativas de esa nueva sociedad en aspectos como la demanda de transparencia del gasto público y para enfrentar con eficiencia la corrupción.

Cualquier cambio implica un trauma cuando es generado por una crisis que lo motiva y lo impulsa, es necesario entender las nuevas relaciones impuestas por la expansión del conocimiento y la distribución de la tecnología. Se han transformado las agendas para los tres liderazgos primarios en función de nuevas prioridades. 

Nuestra sociedad madura, da señales de avance al reclamar y demandar a sus líderes un liderazgo responsable, debemos aprovechar esta oportunidad para fortalecer esa voz ciudadana, para que continúe el reclamo hasta lograr los niveles de desarrollo institucional necesarios para garantizar el convertirnos en una sociedad del siglo 21.  

Los países que ofrecen mayor transparencia en la administración pública, son los de mayor desarrollo y crecimiento económico. 

Debemos actualizar la agenda para reorientar la inversión en investigación y desarrollo, en aplicaciones que puedan garantizar procesos genéricos despersonalizados que permitan una correcta fiscalización basados en tecnología.

Una nueva sociedad, requiere de un nuevo liderazgo político que se actualice y busque sintonizar con las grandes mayorías en todas sus demandas. La discusión se enrarece cuando se politiza o se enfocan las soluciones en descalificar personas cuando deberíamos analizar procesos.

La madurez es necesaria para que la sociedad asuma un rol critico racional y sobre la base de propuestas para mejorar procesos al margen de los actores. La madurez es necesaria en el liderazgo político para identificar las demandas sin verlas como un ataque a su permanencia en el lugar de poder que se le ha delegado. 

Mencía Ortíz



           




















  





   

viernes, 27 de enero de 2017

Para qué nos sirve Duarte.


Celebramos el día del natalicio de Juan Pablo Duarte, muchos dominicanos sacaron la bandera y la colocaron en un lugar visible para anunciar al mundo un homenaje patriótico a nuestro prócer. Con su nobleza, realizó un sueño colectivo de liberación de nuestro pueblo.

El final de su vida es calificado por muchos como un penoso resultado al que se le llama fracaso. Es la excusa de muchos para justificar sus malas acciones, falta de compromiso, 
de entrega, sacrificio personal, desprendimiento y honestidad en una carrera política.

Para un buen segmento de los dominicanos, Duarte reposa en el lugar sublime de los ideales utópicos. Sus ideas y pensamientos plasmadas en frases estelares que se repiten hoy como ejercicio patriótico sin ningún efecto que modifique la conducta cívica o política. 

Nuestro patricio, parece destinado a la eterna admiración y al suspiro de resignación de aquellos que al contemplar su hazaña, sueñan vanamente con superarla. La definición de éxito del liderazgo político dominicano está totalmente desvirtuada al día de hoy. 

El pragmatismo es muy atrevido al considerar la lucha por ideales colectivos, un medio para un fin:poder y dinero. En eso se resume el éxito en política en la república dominicana, cualquier otra recompensa es solo retórica.

Duarte es un fantasma que viene de otro mundo a inspirar a algunos a soñar con el bien colectivo. A creer en sus ideales y en consecuencia a entregarlo todo por la patria. Aquellos que sabemos el valor de la integridad, de la trascendencia y lo efímero de la fama o del dinero, el nos sirve de estímulo.

Gracias a el, podemos definir el éxito político mas allá del ejercicio o preservación del poder, mas que por las riquezas acumuladas o el reconocimiento de tu generación. Su sueño aun está pendiente y su obra como nunca incompleta. Es importante recordar mas allá de su persona, su ideario inmortal. 

El mejor homenaje, es convertirnos en soñadores de una mejor patria. En luchadores incansables por una mejor nación, en clones de su legado, en imitadores de su honradez y desprendimiento, en admiradores de su ejemplo.

Duarte nos sirve para destruir los malos dominicanos, esos que dicen que no se puede. Los que creen que tratar de transformar o cambiar la sociedad es una perdida de tiempo. Los que piensan que no vale la pena entregarnos por nuestro país.

Duarte es la respuesta para aquellos que no tienen conciencia. Sobre todo para los que quieren disuadirnos, los mercenarios del montón que se conforman con migajas, los bastardos sin gloria que ensucian la historia.

Aquellos que se mofan diciendo: que el terminó, pobre, exiliado y sin poder, deben saber que no es un tonto aquel que cambia lo que no puede retener, por aquello que nunca podrá perder. Para eso sirve Duarte, para soñar, para luchar y para servir.

Viva Juan Pablo Duarte, Viva la República Dominicana!!!